El 4 de octubre celebramos la fiesta de nuestro patrón, Francisco de Asís, que, como su nombre indica, nació en Asís (Italia). Su familia se dedicaba al comercio de telas, perteneciendo a una familia acomodada.
Cuando cumplió 20 años, se declaró una guerra entre Asís y Perugia. Francisco fue a la batalla, cayó prisionero y así permaneció durante un año. Quiso volver a combatir, pero enfermó y, durante este proceso, decidió abandonar la lucha y, a partir de ese momento, su vida se transformó: se dedicó a ayudar a los más necesitados. Desde la pobreza, fundó la orden de los franciscanos. Algo que le caracteriza mucho es su amor a los animales y a la naturaleza.
Nosotros celebramos una Eucaristía, presidida por Alberto, nuestro profesor de Religión, y, acto seguido, siguiendo el ejemplo del santo, nos dirigimos al parque de la Fuente del Berro, a disfrutar de la naturaleza y de unos juegos que nos preparó nuestro profesor de Educación Física, como, por ejemplo: relevos, voleibol, balón prisionero, etc. Pasamos una mañana estupenda y llegamos a casa, rendidos, pero contentos.
Inés Ramírez Martín, 3º de ESO
Comments